COAG Coordinadora Agraria de Extremadura exige medidas urgentes de aplicación inmediata para los fruticultores extremeños.

La campaña 2017 en el sector de la fruta de hueso ha sido nefasta para los intereses de los agricultores y agricultoras. Tras varios años en los que las liquidaciones a los agricultores y agricultoras en Extremadura han sido bajas o muy bajas, provocando la reducción de los ingresos e incluso el abandono de explotaciones, la situación actual es muy complicada. Las liquidaciones del año 2017 no han permitido cubrir costes de producción en la mayor parte de los casos y la situación de crisis se extiende en el tiempo y en todas las áreas de producción.

A ello hay que sumar el incremento constante de los costes de producción, el estancamiento del consumo, el colapso del mercado europeo (veto ruso), las prácticas de la distribución comercial, las dificultades generadas y escasez de uso y efectividad de las medidas de regulación de mercado.

 

MEDIDAS URGENTES Y DE APLICACIÓN INMEDIATA PARA LOS FRUTICULTORES

  • Reducción a cero de los módulos para la fruta dulce en el cálculo de la renta de 2017 y ampliación de la partida de gastos de difícil justificación del 5% al 10% para aquellos que optan por la estimación directa simplificada
  • Apertura inmediata de la línea de avales de SAECA
  • Ayudas y moratorias para los préstamos contraídos y establecimiento de líneas de financiación bonificadas y créditos blandos para afrontar la futura campaña
  • Condonación de las cuotas a la Seguridad Social
  • Condonación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI)
  • Recuperación del máximo porcentaje de subvención estatal en la contratación del seguro de la fruta

 

 OTRAS MEDIDAS

  • Mantenimiento de los controles específicos de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) en el sector de la fruta: es necesario un mayor esfuerzo respecto del cumplimiento de la Ley 12/2013, en especial, de la contratación obligatoria y la eliminación de la venta a resultas. Los controles sobre el terreno de AICA han de realizarse durante los periodos de cosecha y comercialización de la fruta de tal modo que su anuncio tenga un efecto amplificador en Extremadura.
  • Establecimiento de un plan de coordinación, formación y control de la calidad y el etiquetado en los puntos de venta: debe ponerse en marcha un plan de coordinación y formación de las distintas autoridades competentes en inspección y control de las normas de calidad, etiquetado y comercialización en los puntos de venta al consumidor. A continuación se debe poner en marcha un plan de control e inspección, con recursos suficientes, para hacer cumplir las normas de calidad etiquetado y comercialización. El consumidor debe disponer de información veraz y suficiente, tal y como se dispone en la normativa, respecto de lo que está adquiriendo, sea cual sea el punto de venta. Es especial debe controlarse especialmente el etiquetado del origen. Asimismo, siempre es inadmisible la existencia de fruta en los puestos de venta por debajo de los estándares de calidad.
  • Intensificación de las inspecciones y controles en frontera de las importaciones de fruta dulce, productos sustitutivos de la fruta dulce y de productos transformados de países terceros: la fruta producida por los productores europeos es la que presenta estándares más elevados de calidad y seguridad alimentaria (trazabilidad, límite máximo de residuos, menor número de fitosanitarios autorizados y de menor toxicidad, etc.). Estos requerimientos de calidad y seguridad alimentaria se deben exigir a las importaciones.
  • Producto de calidad vs. commodities: primar los kilos frente a las cualidades organolépticas afecta al descenso del consumo y favorece la sustitución de la fruta dulce por otras producciones (frutas tropicales, importaciones de otras frutas fuera de estación, productos lácteos…). Debe propiciarse en las relaciones de la cadena la mejora de la calidad y la búsqueda de productos diferenciados.
    • Las administraciones han de posicionarse claramente a favor del modelo de producción basado en una fruticultura con fruticultores, en una agricultura familiar de agricultores profesionales, que se ve amenazado por inversiones externas que buscan sólo rendimientos económicos sin generar ni tejido social, ni mantenimiento de la población rural y del medio ambiente. En un contexto de restricciones presupuestarias, y en pro de la defensa del citado modelo social y profesional de agricultura, los apoyos públicos han dirigirse únicamente a las pequeñas y medianas explotaciones profesionales agrarias, evitando que caigan en manos de grandes empresas y agentes comerciales.

 

EVOLUCIÓN DEL DIFERENCIAL DE PRECIOS ORIGEN-DESTINO

COAG realiza desde 2007 el Índice de Precios Origen y Destino (IPOD) que trata de analizar la evolución de los precios percibidos por el agricultor y los que paga el consumidor por los productos agrarios, mostrando la evolución de los márgenes comerciales en cada producto.

En esta ocasión se ha realizado un estudio pormenorizado y particular para melocotón y nectarina desde el año 2013 hasta la campaña pasada 2017 (Figuras 1 y 2).

Se pueden extraer las siguientes conclusiones:

La campaña pasada se registraron los records en los diferenciales origen-destino: en 2017 se alcanzaron los máximos márgenes comerciales del periodo estudiado. En melocotón el margen medio en 2017 se situó en un 732% y en nectarina 722%, con valores máximos en agosto de 2017 del 1.067% en melocotón y del 1.053% en nectarina. Ni siquiera en el año de inicio del veto ruso (2014) se produjeron valores tan elevados: en melocotón el margen medio fue del 612% con un máximo en agosto de 2014 del 988% y en nectarina, la media se situó en 603% y un pico en agosto del 900%. Los márgenes medios en el resto de los años analizados se han situado entre el 220% y el 386%.

El precio en destino muestra una tendencia estable y creciente a lo largo de los años: el precio medio en destino entre 2013 y 2017 se ha incrementado un 12,3% en melocotón y un 16,3% en nectarina, alcanzando un pico en este promedio en 2016 con 2,39 €/kg y 2,37 €/kg respectivamente.

El precio en origen es mucho más errático y en 2017 ha sufrido un gran descalabro: en melocotón la cotización media en origen se ha situado en 0,28 €/kg mientras que en nectarina ha estado en 0,29 €/kg. Estos valores son, respectivamente, un 44% y 47% inferiores a la media de los años 2013-2016. Los mínimos se han situado en los meses de agosto (0,15€/kg) y septiembre (0,19 €/kg) para ambos productos.