El salón de actos de la Universidad Popular de Burguillos del Cerro acoge una exposición de Pinturas del artista Francisco Zarallo Llera titulada “De lo Místico a lo Profano” hasta el 15 de septiembre.

Se trata de una amplia y variada muestra compuesta por cuarenta cuadros realizados al óleo en diferentes soportes como tela, madera o cartón utilizando diversas técnicas pictóricas. Algunas son interesantes copias con las que se acerca a los maestros del mundo clásico tales como las tituladas El bautismo de Cristo en el Jordán, El bebedor de cerveza o Briseida ante Agamenón.

Francisco Zarallo Llera nació en Burguillos del Cerro el 5 de octubre de 1945 y estudió Magisterio en la “Escuela Normal” de Badajoz. Muy pronto empezó a interesarse por las Bellas Artes asistiendo a las clases de modelado y dibujo de los profesores José Collado e Isauro Luengo y, posteriormente, entabló una estrecha amistad con la afamada pintora onubense Lola Martín Martín, asistiendo a su estudio y compartiendo su espacio artístico.

Zarallo ha trabajado de docente en Burguillos del Cerro, Ayamonte, Zafra y Marbella y, en Reino Unido, en Northhampton y Brackley. En 1992 se trasladó a Oriente Próximo conociendo la cultura de ciudades como Turquía, Siria, Jordania, Armenia, Egipto, Pakistán, India o Nepal. En 2005 se trasladó a la Universidad de San Marcos de Lima (Perú) realizando estudios de arqueología y antropología andinas, además de labores de investigación en los museos de Arqueología y Antropología de Pueblo Libre y en la Casa de Museo Ricardo Palma, en Miraflores (Lima). Actualmente, el artista reside en Marbella y continúa viajando y pintando pues son aficiones que le proporcionan bienestar y paz espiritual.

El prólogo ha corrido a cargo de la profesora María José Flores Requejo quien resalta que Zarallo es un pintor enamorado de la luz, de la naturaleza, que ama componer espacios armoniosos y vitales y que se reflejan en obras como Ermita del Santo Cristo o Ruinas de Santa María. También señala que nos encontramos ante un pintor dotado de gran sensibilidad artística, que trabaja de forma rápida e intuitiva, siguiendo el impulso de la inspiración y que, temáticamente, se mueve entre lo divino y lo humano.

“La de Francisco Zarallo Llera es una mirada abarcadora, que suma, que no excluye, lo que hace especialmente interesante y atractivo el mundo, complejo y variado, que nos ofrece en sus cuadros (…). Se expresa a través de una paleta de colores primarios, puros; de colores exuberantes y protagonistas, capaces de transmitirnos emociones y entusiasmo. La paleta de un artista vital y para quien el arte es una forma de exaltación de la vida en todos sus aspectos y con todos sus matices, de exaltación de lo místico y de lo profano”.