Ingredientes

  • almejas
  • cebolla
  • ajo
  • caldo de pescado
  • harina
  • huevos
  • patatas
  • vino blanco
  • perejil fresco
  • sal
  • aceite de oliva vírgen extra

Elaboración

Pica finamente las hojas de perejil y pela las patatas. Al cortarlas en rodajas intenta que tengan un centímetro de grosor y sazónalas.

Casca los huevos y bátelos en un bol. Y en otro bol lava las almejas con agua y sal para que expulsen la mayor cantidad de tierra posible.

Después, pica la cebolla y los dientes de ajo finamente y rehógalos en una sartén grande puesta al fuego con un poco de aceite hasta que queden bien blandos. Entonces incorpora ¾ partes del perejil picado, remueve y echa el vino blanco. Con paciencia deja que reduzca a la mitad de su volumen. Por último, echa el caldo de pescado y, una vez que rompa a hervir, pon sal para que quede en su punto y retira.

Reboza las rodajas de patata en harina y después por huevo batido. Fríelas levemente a fuego medio y pásalas a una bandeja con papel absorbente. En un rondón o cacerola muy ancha pon las rodajas de patata rebozada hasta cubrir toda la base. No deben quedar muy pegadas ni amontonadas.

Finalmente, incorpora la salsa que habías elaborado a las patatas hasta cubrirlas generosamente y deja cocer durante unos 15 minutos a fuego suave con la cacerola tapada hasta que la patata quede tierna. Será necesario que hagas de vez en cuando movimientos de vaivén para que no se peguen. Cinco minutos antes de terminar la cocción, integra las almejas y pon a punto de sal y pimienta.