La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) aprovecha su participación en la mesa redonda “Situación actual de la Apicultura en la Península Ibérica”, que se celebrará mañana dentro de la XXXV Feria Apícola Internacional de Pastrana, para reclamar a las autoridades un plan de apoyo al sector en el que participen de manera coordinada las Administraciones Públicas.

La apicultura es una actividad ganadera que cuenta en España con 5.300 profesionales de los 19.000 que hay en el conjunto de la Unión Europea. Nuestro país es líder en el sector de la miel con 2.700.000 colmenas que generan una producción nacional superior a las 32.000 toneladas anuales. Para el responsable de Apicultura de UPA, Antonio Prieto, estas cifras demuestran la importancia del sector en sí mismo, pero recuerda que “también es vital para el resto de actividades del campo ya que las abejas son uno de los pilares básicos de la agricultura”.

Sin embargo, las importaciones masivas de China, que este año han superado las 17.000 toneladas, son uno de los problemas a los que se enfrenta el sector en la actualidad. Por ello, Antonio Prieto reclama controles internos y externos y un etiquetado obligatorio que refleje el origen y el porcentaje de la mezcla de mieles. “Tenemos que garantizar a los consumidores que la miel que entra en Europa cumple con las exigencias de calidad que demanda nuestro mercado”, explica.

Prieto también apuesta por fortalecer los apoyos de la PAC en los Programas Nacionales Apícolas. “Estos programas deben servirnos para proteger nuestras rentas y consolidar la profesionalización del sector”, dice. Asimismo, el responsable de Apicultura en UPA reivindica un mayor impulso a las políticas sanitarias del sector, con el objetivo de hacer frente a las enfermedades de las cabañas y al despoblamiento de las colmenas: “Hay una gran descoordinación entre las Administraciones que está perjudicando gravemente al sector”.

Otras demandas de UPA en este sentido son el establecimiento de un sistema de constatación de precios “fiable”, que se enmarque dentro del Observatorio de Precios del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente; mayores controles sobre el uso de los pesticidas que contengan neonicotinoides y de los cultivos OGM (organismos genéticamente modificados); un Plan para el control de los abejarucos y del avispón asiático; el apoyo claro a la apicultura trashumante, ya que muchos ayuntamientos están impidiendo esta práctica; y el refuerzo a través de la Interprofesional de la investigación y promoción de los productos apícolas, así como el fomento de los canales de comunicación con figuras de calidad diferenciadas.