El Hemiciclo de la Asamblea de Extremadura acogió hoy el Segundo Pleno Escolar contra el Bullying o acoso escolar por LGTBIfobia. Una iniciativa de la Fundación Triángulo Extremadura en la que han participado estudiantes de los institutos Cristo del Rosario, de Zafra, y Ruta de la Plata, de Calamonte, y que contó con los testimonios personales de jóvenes y familiares para promover el diálogo entre todos los agentes de la comunidad educativa en esta materia.

Durante el trascurso del acto tomó la palabra la presidenta de la Asamblea, Blanca Martín, que dio la enhorabuena y mostró su agradecimiento a la Fundación Triángulo y a todos los participantes por una iniciativa “que este año repetimos como buena práctica y que tuvo el reconocimiento, -recordó-, de la Conferencia de Asambleas Legislativas Regionales de Europa (CALRE)”.

En este sentido, la presidenta de la Cámara extremeña se refirió al Premio “Estrellas de Europa” concedido por la CALRE a la Asamblea de Extremadura por la celebración, el año pasado, del Primer Pleno Escolar del país contra el Bullying por LGTBIfobia. Un premio que, como explicó, es compartido con la Fundación Triángulo y que recogerá el próximo día 10 en Sevilla durante la celebración del Plenario de la CALRE.

Martín declaró que España es un país “del que debemos estar orgulloso por su amplia legislación en materia LGTBI, poco habitual en el ámbito europeo”. “Somos de los países y regiones que tenemos una ley específica sobre LGTBI y de igualdad de género, por eso me sentiré orgullosa de recoger ese premio compartido entre la Fundación Triángulo y la Asamblea de Extremadura”.

Destacó asimismo el trabajo realizado por la Fundación Triángulo durante años en “problemas de carácter regional, nacional e internacional”. “Desde el primer momento que llegué a presidir esta Asamblea, -añadió Martín-, José María y Pablo estuvieron conmigo en la reivindicación y en la defensa de los Derechos Humanos” y animó en este sentido a seguir trabajando y luchando “para que esta experiencia se pueda implantar en otros parlamentos regionales y en las Cortes Generales del Estado español, pero que además lo exportemos más allá de nuestras fronteras, a aquellas democracias desarrolladas, para que tengan lugar plenos donde se visibilice y denuncie el acoso y, sobre todo, el respeto a los derechos humanos en todos los ámbitos de nuestra vida”.

Por su parte, la portavoz de la Junta de Extremadura, Isabel Gil Rosiña, anunció durante su intervención que el Gobierno regional está “trabajando ya en un convenio que vamos a firmar con la Universidad de Extremadura para realizar un estudio sociológico sobre la realidad LGTBI en el mundo educativo de nuestra región”.

En ese sentido, Gil Rosiña explicó que se trata de dar respuesta al mandato del “artículo 20 de la Ley -de igualdad social de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transgénero e intersexuales y de políticas públicas contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género en la Comunidad Autónoma de Extremadura- que insta al Gobierno de Extremadura a poner en marcha un plan integral LGBTI en el mundo educativo”. “Y no podemos hacerlo sin tener un conocimiento veraz de la realidad”, matizó.

Por otro lado, el vicepresidente de la Fundación Triángulo y responsable del Área de Atención Institucional y Mediática de la Fundación, Pablo Cantero, afirmó que “nuestro objetivo es hacer de los centros educativos un lugar mejor; hacer de nuestras escuelas e institutos espacios más amables para todos y para todas; hacer que las aulas, los pasillos y los patios sean espacios seguros para estudiantes y profesores que son gais, lesbianas, bisexuales o transexuales y para aquellos niños y niñas que son parte de una familia LGTBI”.

Cantero añadió que “para lograrlo necesitamos la complicidad, las estrategias compartidas, el trabajo conjunto, las acciones sinérgicas de todos los agentes que conformamos la comunidad educativa extremeña”. “Ojalá hoy seamos capaces de repensar cómo hemos de ir más allá de una educación en la condena en abstracto de la violencia a una educación que ataje de raíz las actitudes de rechazo y de discriminación que están en la base de esa violencia”, concluyó.

El pleno contó con las aportaciones de docentes y estudiantes LGTBI, así como con testimonios de madres que pusieron de manifiesto sus experiencias personales respecto al bullying o acoso escolar abordado hoy.

Durante la sesión plenaria se llevó a cabo la votación de un “Contrato Escolar de Compromiso con la Diversidad”. Un decálogo de medidas que los alumnos y alumnas participantes se comprometieron a asumir para declarar su aula “Espacio LGTBIfriendly”.

Entre los compromisos adquiridos destaca el de no utilizar términos ni expresiones, comentarios o chistes sexistas, homófobos y/o transfobos; trabajar en la sensibilización sobre los principios de igualdad de derechos y oportunidades y de respeto a la diversidad LGBTI; no presuponer la heteresexualidad ni el género de las personas que nos rodean y ayudar a romper estereotipos y roles de género con el fin de fomentar y facilitar la libertad y la convivencia.