La consejera de Educación y Empleo, Esther Gutiérrez, ha destacado el acuerdo alcanzado entre el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y las comunidades autónomas para aprobar el Plan Anual de Política de Empleo para 2018, destacando el buen clima de consenso. “Por primera vez, se ha llegado a un acuerdo antes de que se inicie 2018. Eso nos permitirá a las distintas comunidades autónomas organizarnos en cuanto a las políticas de empleo que vamos a llevar a cabo”, ha destacado Esther Gutiérrez al término de la LXVIII Conferencia Sectorial de Empleo y Asuntos Laborales, que ha tenido lugar hoy en Madrid.

Así, en este foro se han aprobado los objetivos, los indicadores que luego se van a evaluar para repartir los fondos entre las distintas comunidades autónomas. Un punto en el que el Ministerio ha rebajado finalmente el número de indicadores que planificaba exigir a las regiones a la hora de repartir los fondos. Estos se han reducido de los 72 previstos inicialmente, a los 44 que finalmente se tendrán en cuenta.

“Cualquier acuerdo es fruto de cesiones y renuncias por ambas partes y, en este caso, ha habido voluntad, tanto por parte del Ministerio, como por parte de las distintas comunidades autónomas”, ha expresado la consejera.

La titular de Educación y Empleo sí ha mostrado su divergencia porque se mantenga un indicador, el del número de sanciones. “Ha habido divergencias en un indicador, que no hemos conseguido que el Ministerio cediera y en el que la mayoría de CCAA no estamos de acuerdo, es el de que cuantas más sanciones pone cada comunidad, computa más a la hora del reparto de fondos. Nosotros hemos dicho que existe otra fórmula para seguir manteniendo esas políticas activas y pasivas, sin la necesidad de sancionar”, ha asegurado Esther Gutiérrez.

En este sentido, Esther Gutiérrez ha celebrado que el Ministerio se haya comprometido a crear un grupo de trabajo, de cara a planificar el Plan Anual de Política de Empleo para el año 2019, a propuesta de las comunidades autónomas, para reducir el número de indicadores y adaptarlos a las necesidades de cada comunidad.

“Tenemos una idiosincrasia totalmente distinta cada comunidad autónoma. Esto no consiste en querer competir entre comunidades, sino en permitirnos mejorar y que podamos llevar a cabo políticas que beneficien a la mejora de la empleabilidad de las personas”, ha manifestado la consejera, que ha asegurado también que “nos parece fundamental para poder seguir avanzando y poderle dar agilidad y hacer políticas mucho más productivas y que beneficien a nuestros desempleados y desempleadas”.