El flamenco sicodélico, la rumba, el funk o el folk contemporáneo serán los primeros sonidos que se escuchen en WOMAD Cáceres 2019 en su primer día de conciertos en la Plaza Mayor, que abren hoy los extremeños de EnVerea a las 20.00 horas, dando inicio a un estallido de músicas del mundo que inundarán el centro histórico de la ciudad hasta el domingo. 32 grupos y solistas de catorce países difundirán desde hoy y hasta el domingo su mensaje de música y tolerancia desde Extremadura.

El acto inaugural de la edición 28 del festival, previo a los conciertos, tendrá lugar en el Gran Teatro a las 18.00 horas y en él intervendrá la artista de talleres Mariella Köhn.

Los primeros espectadores del Womad recibirán a las 20.00 horas a EnVera, que han consolidado en sus ocho años de trayectoria su apuesta por el folk contemporáneo de raíces en los cancioneros tradicionales extremeños. Miguel Caldito y El Combo Utopía, que comienza su concierto a las 20.45 horas, llegan a Cáceres con un bagaje de vida musical errante que empezó en Badajoz y le ha llevado por Europa y América Latina. Y así es su música,atravesada por la rumba, el flamenco, el rock o el reggae.

A las 21.45 saldrán al escenario principal de la Plaza Mayor Quentin Gas & Los Zíngaros, que han definido su música como si Camarón grabara con Tame Impala entre Sevilla y Londres, se unieron en 2014, y sólo con un disco y un puñado de singles han fundamentado la atracción que despierta su flamenco sicodélico y rockero.

A Quentin Gas le sucederá a las 23.00 Vaudou Game, con su herencia de música ritual del vudú practicado en Togo. Vaudou Game es el proyecto de Peter Solo, cuya infancia en el país africano está vinculada a las tradiciones musicales religiosas de sus padres (su madre, próxima al vudú; su padre, afín al catolicismo). A este origen iría sumando las melodías  del pop, del soul o del funk, que él músico escuchaba antes de dar el salto a Europa donde fundió sus conocimientos para dar con la base de la música funk con elementos afrobeat y high life, que caracteriza su música. Su último álbum, es Otodi, publicado el pasado año.

Estos primeros cuatro conciertos de WOMAD Cáceres 2019 darán paso del viernes al domingo a voces musicales de catorce países, entre ellas las de John Ellison, el músico de soul que conoció el racismo en su país, Estados Unidos. También la de Calypso Rose, la“reina del calypso”, una luchadora en Trinidad y Tobago por la igualdad y los derechos humanos. La de Pascal Danaë, líder de Delgres, que tomó este nombre de un soldado negro que luchó contra la esclavitud en Guadalupe. Y la de la turca Gaye Su Ayol, que funde en su música un compromiso político y poético. También la de Les Negresses Vertes, un nombre asociado a una canción concebida como manifiesto antirracista. Y la de Manwar, cuya trayectoria está inspirada por el pasado esclavista de su país, Isla Mauricio; o la de la argentina Mica, militante de los derechos de la mujer.

Este conjunto de creadores de España, Togo, Francia, Perú, Argentina, Turquía, Marruecos, Estados Unidos, Inglaterra, Isla de Mauricio, Cuba, Holanda, Senegal y Trinidad y Tobago aguarda a decenas de miles de aficionados a los ritmos y melodías del mundo. A los citados se suman los españoles de Colectivo Panamera, la cubana Yaite Ramos con su proyecto La Dame Blanche, el marroquí Maalem Hamid El Kasri, la española María Rodés, la hispanoperuana Mariella Köhn y los holandeses de Jungle by Night.

Aunque la presencia extremeña es destacada en la programación del multitudinario espacio de la Plaza Mayor, con nombres como DelRey y Seventh Sun, u otros como Les Motriz, EnVerea y Carlos Rodríguez Cid, los grupos extremeños emergentes cuentan con un espacio propio en la plaza de Santa María, el denominado escenario IJEX@WOMAD. Allí desplegarán sus bagajes musicales Tree House, Free Mind, Pepe Peña & The Garden Band, Puerta Oeste, Los Tai Tabú, La Moma Vieja, J. Vega y Arias.

Ciclo de cine

En esta primera jornada de WOMAD Cáceres 2019 comienza también el ciclo de cine de cuatro filmes sobre la África contemporánea e histórica, que se proyectarán en la Filmoteca de Extremadura. El primer título de este acercamiento a la realidad del continente africano es el documental de Mozambique Maputo. Etnografía de una ciudad dividida, dirigido por João Graça y Fábio Ribeiro en 2015. La película, que se exhibe hoy a las 18.30, retrata la ciudad mozambiqueña y las divisiones sociales que existen entre los suburbios y la denominada “ciudad de cemento”, según lo cuentan ciudadanos de ambos núcleos residenciales.

Y junto a la música y el cine, el festival cacereño pone también en circulación la palabra que ofrece Mundo de Palabras. Los relatos orales cobran protagonismo en Lectores de mundos, la cita prevista este jueves a las 12.00 en los centros de mayores de la Plaza Mayor, la Peña del Cura y Cervantes. En cada uno de ellos,jóvenes estudiantes de la Escuela de Arte Dramático de Cáceresleerán para mayores. Por la noche, a las 22.30 se inaugurará la exposición Cielo sobre cielo, del fotógrafo extremeño Lorenzo Lumeras.

El festival, que tiene el respaldo de la Junta de Extremadura, la Diputación de Cáceres y el Ayuntamiento cacereño a través del Consorcio Gran Teatro, incorpora, como cada año, su Mercado Global, donde la artesanía y la gastronomía evocan en colores y sabores y tactos el espíritu de la diversidad del mundo, y convoca a una representación de oenegés que acuden a Cáceres para dar a conocer sus proyectos humanitarios.

Música, baile y la elaboración de objetos llenarán de contenido los talleres para niños y para adultos del festival, que impartirán Mariella Köhn, Mica, Sicobana, Wolfworks y Creative Workshops.

Además, la iniciativa Cada Lata Cuenta volverá a estar presente este año en WOMAD Cáceres 2019, que quiere hacer hincapié en la idea de civismo durante los días de celebración de sus actividades. Con este mismo espíritu y en colaboración con la Asociación de Vecinos de la Ciudad Monumental, se ha elegido el lema “Con CIVISMO, el WOMAD suena mejor”, con la que pretende hacer llegar al público la necesidad de disfrutar del festival cuidando el entorno, que es patrimonio de la Humanidad.