UPA-UCE Extremadura ha mantenido hoy una reunión con el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, donde le ha trasladado la “crítica” situación que vive el campo debido a la sequía. En dicho encuentro, esta organización agraria le ha trasladado al presidente del Ejecutivo un conjunto de medidas para paliar sus efectos y que los ganaderos “obtengan una respuesta ante sus pérdidas”.

Entre las medidas urgentes, esta organización agraria ha destacado la necesidad de revisar el funcionamiento y rectificar los datos de seguro de sequía en pastos, ya que hay una disfunción clara y evidente entre lo que marca el satélite y la realidad que viven las explotaciones ganaderas. Además, UPA-UCE ha planteado una línea de ayudas para la construcción de pozos, abrevaderos y transporte de agua con el objeto de abastecer al ganado.

Por otro lado, UPA-UCE también ha propuesto otro tipo de medidas como que se solicite la utilización del Fondo de Catástrofes Naturales que la UE prevé para situaciones excepcionales, de tal forma que se arbitren ayudas directas a los afectados; que se flexibilicen determinadas medidas de la PAC que las explotaciones no podrán cumplir por la sequía, así como medidas de tipo económico para dar liquidez a los afectados.

“No puede ser que con la situación tan grave que se está viviendo el seguro no detecte sequía, señala el secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas.

Por su parte, el presidente de la Junta ha adquirido el compromiso de trasladar esta situación al ministro de Agricultura y a Agroseguro, al mismo tiempo que ha planteado ampliar una línea de ayudas a la biodiversidad de las explotaciones ganaderas, no solo para las afectadas por tuberculosis sino también para las afectadas por la sequía con el objetivo de dar respuesta a nuestra petición de apoyo para abastecer al ganado.

Por otro lado, Vara también ha adquirido el compromiso de trasladar al Ministerio exenciones fiscales y de seguridad social y, con el objetivo de dar liquidez, estudiar una moratoria para la devolución de los últimos préstamos que sacaron los ganaderos con el problema de la sequía y que todavía no se han terminado de amortizar.