Ocho municipios se han convertido en los primeros de la provincia pacense en suscribir el Pacto de las Alcaldías para el Clima y la Energía Sostenible (PACES) con los objetivos a 2030, manifestando así su compromiso en la lucha contra el cambio climático y la descarbonización, y pudiendo beneficiarse en el futuro de las ventajas que les otorga el status de firmantes del pacto.

En concreto, se trata de las localidades de  San Vicente de Alcántara, Alburquerque, Talavera la Real, Olivenza, Villanueva del Fresno, Oliva de la Frontera, Jerez de los Caballeros y Fregenal de la Sierra, situados en la Raya portuguesa.

Una iniciativa desarrollada en el marco del proyecto URBANSOL, financiado a través del programa Interreg España-Portugal (POCTEP), que nace con el objetivo de implementar una serie de planes de acción de desarrollo interurbano sostenible e inteligente (PADISI), dirigidos a mejorar la eficiencia en el uso de recursos y servicios y, por tanto, alcanzar una economía baja en carbono y autosuficiente desde el punto de vista energético.

Precisamente, los alcaldes o representantes de estas localidades –excepto Talavera y Jerez, que han excusado su presencia– han recogido hoy esos planes durante un acto celebrado en el Paraninfo del Palacio Provincial. En este caso, la Diputación de Badajoz, a través del Área de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, ha gestionado la elaboración de la documentación técnica de los ocho municipios, cuya entrega les ha hecho alcanzar el status de firmantes de pleno derecho del pacto.

Esta documentación incluye: un inventario de Emisiones de Línea de Base (BEI) que cuantifique el CO2 emitido en el territorio del signatario; evaluación de riesgo y vulnerabilidad (RVA) con un análisis de posibles riesgos climáticos y la evaluación de las vulnerabilidades en el territorio del firmante, así como  el Plan de Acción para el Clima y la Energía Sostenible (PACES), aprobado por el consejo municipal dentro del plazo descrito de dos años, tras su decisión oficial de unirse a la iniciativa del Pacto de las Alcaldías, que describa las medidas y políticas que se implementarán para lograr los objetivos.

Pasados dos años desde la aprobación del PACES, se hará un informe de seguimiento que evalúe el progreso del plan de acción.

El presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, ha señalado que este primer paso dado por estos ocho municipios “debe ser un acicate para seguir trabajando” contra el cambio climático.

Como precisa Gallardo, los pueblos de la provincia “están trabajando por la descarbonización, pero no se nos ve”. Y en este sentido, ha recordado las iniciativas que se están acometiendo desde el Plan Smart Energía, con el cambio de luminarias, haciendo edificios públicos eficientes o instalando puntos de recarga de vehículos eléctricos.

Pese a todo, se ha mostrado autocrítico y que ha apuntado que “debemos incrementar el esfuerzo conjunto de las administraciones para alcanzar los objetivos que nos marcamos en 2018, que no hemos sido capaces de conseguir”.

Por tanto, con estos ocho planes, añade el presidente provincial, “hemos iniciado el camino y ahora debemos dar el acelerón en los próximos años”. Y es que, como ha recordado, estos planes “son la carta de presentación de estas localidades que les privilegia de cara a ir mejor preparados para las futuras convocatorias a los fondos europeos”.

La Diputación de Badajoz, a través del Área de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, participa como beneficiario en el Proyecto RED URBANSOL, que cuenta con fondos europeos dentro del programa POCTEP de Cooperación Portugal España URBANSOL. El proyecto Red URBANSOL está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) a través del Programa Interreg V-A España-Portugal (POCTEP) 2014-2020.