La Feria del Libro 2020 ofrecerá cada día actuaciones musicales, con entrada gratuita, que tendrá como ubicación el escenario del Templo de Diana. “Un espacio ideal” tal y como lo define la Delegada de Cultura, Silvia Fernández, que recalca que también permite “disfrutar de la feria y las actuaciones y cumplir las medidas sanitarias establecidas”.

El jueves, 1 de octubre, tras la inauguración oficial de la feria tendrá lugar el concierto de Miguel Tron que presentará De lo vivido y lo cantado a las 22 horas.

El viernes, 2 de octubre, también a las 22 horas, será el turno para el flamenco de Airearte.

El sábado 3 de octubre actuará la Asociación Folklórica de Nuestra Señora de La Antigua desde las 11.30 horas. Por la noche, a las 22 horas, se pondrá en escena el espectáculo En femenino, un proyecto de la Asociación Extremúsica que tiene como objetivo visibilizar y combatir las diferencias que existen en el sector musical.

Este evento ofrecerá “letras llenas de empoderamiento, fuerza, esperanza, amor y visibilidad. Historias que dan alma a un proyecto que pretende traspasar fronteras, concienciar, transmitir valores y dar un baño de realidad al panorama musical femenino, para que de este modo las nuevas generaciones puedan tener unos referentes que les animen a luchar por sus sueños” señalan desde la asociación.

El domingo, 4 de octubre, a las 11 horas ofrecerá un concierto la Banda de Música de Mérida. “Será la segunda de las apariciones de esta banda tras el confinamiento, ya contamos con su presencia en La Noche del Patrimonio” recuerda la delegada de cultura.

La actuación de Jesús Ortega cerrará el programa de actos, a partir de las 21 horas. Ortega dirige este espectáculo que arranca con un cante primitivo para la clausura de una feria de cultura, magia e historia que nos mostrará a estos artistas, cada uno en su disciplina, tanto en solitario como en conjunto. Ortega, Ostalinda Suárez, Manuel Pajares y Juan Manuel Moreno, al compás de una soleá por bulería, centran la apertura del silencio y respeto en torno a una mesa, para, a partir de ahí, bendecir la liturgia, la comunión con el duende. Quejío, toque, baile y una flauta que eleva el espíritu de aficionados y profanos ante un arte que este año cumple su X Aniversario de Declaración por UNESCO como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

Ayuntamiento de Mérida