La directora general de Servicios Sociales, Infancia y Familia, Carmen Núñez, ha presentado este viernes en Mérida la Campaña de Prevención de la Violencia Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes, que con el lema ‘Que no me toque’ quiere dar voz a los menores que piden a los adultos protección frente al riesgo de sufrir violencia sexual.

Ha explicado que con esta campaña de prevención primaria se quiere llegar a la sociedad en general pero también a los profesionales que están en contacto con menores, a las familias que pueden tener algún tipo de sospechas y a las instituciones que pueden intervenir en un tema tan grave como son los abusos a menores.

Carmen Núñez ha asegurado que cualquier menor puede ser víctima de abusos sexuales, “con independencia de cuál sea su origen, conformación de su familia o de su red más cercana” y ha recordado que “estamos hablando de una realidad en la que normalmente los ofensores suelen ser del entorno próximo de los niños”.

Ha señalado que en el último año se han abierto en la región 34 expedientes para valoración e intervención de menores que podían estar sufriendo abusos sexuales y ha explicado que más allá de la cifra “importa el daño que se está provocando a cada una de las víctimas”.

Asimismo, ha indicado que el 69 por ciento de los menores que sufren abuso son niñas y que los tramos de edad oscila entre los 8 y los 15 años, mientras que en edades inferiores “no identifican la realidad que sufren o no saben ponerle nombre”.

Núñez, que ha estado acompañada por el jefe de Servicio de Adolescencia y Familias, Manuel Gallego, y la psicóloga de la Fundación Márgenes y Vínculos, María José Ruiz, ha explicado que hablar de los derechos de la infancia no es solo promover esos derechos, sino también protegerlos y estar pendientes de cuáles pueden ser las necesidades y vulnerabilidad de los menores.

En su opinión, lo más importante de esta campaña “es intentar visibilizar una realidad grave, impactante, de la que hablamos poco” y ha dicho que es necesario visibilizarla “para que no permanezca oculto ni un solo caso”.

Ha explicado que la campaña está compuesta por píldoras informativas, ciclos de información y por cuñas publicitarias pero que el “alma mater” de la misma son dos marionetas, “Valeria y Tadeo, una niña y un niño que serán quienes den voz y participación a profesores, menores y familias durante todo el recorrido de esta actividad”.

Asimismo, se ha editado una Guía para Familias sobre la Prevención de la Violencia Sexual contra Niñas, Niños y Adolescentes en la que se define este tipo de abuso como cualquier actividad de carácter sexual, con contacto o sin él, cometida por adultos o menores de edad y que afectan negativamente a quien lo sufre, a veces no a corto plazo sino en la edad adulta.

VIOLENCIA SEXUAL ON LINE

El documento enumera algunas nuevas formas de violencia sexual on line como el ciber-acoso sexual, que es el acoso a través de la red; y el grooming, que es cuando un adulto se hace pasar por un menor para contactar con el niño y establecer así una relación de confianza que más tarde utilizará para conseguir imágenes o videos de contenido sexual.

Otras formas son la sextorsión, que es el chantaje sexual con imágenes o videos; y el sexting, que consiste en el envío voluntario de vídeos o imágenes íntimas a una persona en la que se confía y que esta publica por venganza.

En este sentido, María José Ruiz ha señalado que “con estas nuevas formas de violencia sexual tenemos que estar aún más alerta, saber leer cuáles son los indicadores y buscar otras estrategias para sensibilizar”.