Los cajeros automáticos instalados por la Diputación de Badajoz en treinta pequeñas poblaciones de la provincia que se quedaron sin entidad bancaria, han movido 5,6 millones de euros como consecuencia de las 57.745 operaciones bancarias realizadas por los usuarios.

Unos datos que certifican el éxito del Plan de Lucha contra la Exclusión Fianciera, aprobado por la institución provincial en 2018 y que se plasmó en la instalación de estos treinta cajeros durante los años 2019 y 2020, una vez adjudicado el contrato a Caja Rural de Extremadura.

Hasta el día de hoy se han llevado a cabo por sus usuarios más de 57.745 operaciones bancarias, lo que significa un movimiento de más de 5,6 millones de euros. Del total, el 71% de las mismas han sido reintegros por un importe 5.008.200 euros, el 24,21 % se refieren a actualización de libretas, consulta de saldo y de movimientos, el 4,63% (640.108 €) a ingresos, pago de recibos, tasas etc. y el 0,36% restante, a operaciones de recarga de otras tarjetas, teléfonos móviles… por un valor de 6.495 euros.

Por tanto, este Plan de Exclusión Financiera de la Diputación de Badajoz ha permitido el acceso a este tipo de servicios a más de 13.000 habitantes directos de la provincia (que crece en época veraniega y en fechas concretas), así como a numerosas empresas y visitantes de nuestros pueblos, mejorando la calidad de vida en los mismos.
El presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Ángel Gallardo, reconoce que este plan es uno de los que más orgulloso se siente y ha valorado que estos cajeros también estén incidiendo en “mejorar la calidad del turismo rural”.

Una calidad de vida que evita la despoblación de estas zonas rurales y los desplazamientos a otros núcleos urbanos de mayor entidad. Con esta iniciativa se apuesta por la vertebración territorial y la lucha contra la despoblación, uno de los ejes de la acción del actual gobierno provincial que preside Miguel Ángel Gallardo y por la que se sigue apostando. Este año se han consignado 750.000 euros para este plan, para sufragar el alquiler y mantenimiento de los cajeros.

Cabe recordar que la anterior crisis cerró cientos de oficinas bancarias en el país y estas pequeñas localidades de la provincia debían afrontar el problema de la despoblación con el añadido de la desconexión financiera.
Es por ello, por lo que la Diputación de Badajoz apostó por este plan, con el objetivo de dotar a una treintena de pueblos de los mismos servicios que las grandes ciudades.

Ejemplo a nivel nacional

De esta forma, la provincia de Badajoz se ha convertido en ejemplo y modelo con esta iniciativa a nivel nacional. De hecho, el PSOE en el Senado presentó una moción en septiembre de 2020, que se aprobó por mayoría absoluta, para garantizar los cajeros en las áreas rurales de España que se quedaron sin cajero. En este sentido, el presidente de la Diputación de Badajoz llegó a visitar el Senado en Madrid para ofrecer detalles del modelo implantado en Badajoz.

Los cajeros automáticos, abiertos las 24 horas del día como si fueran una gran oficina bancaria al aire libre, está operativos en estas 30 poblaciones de la provincia de Badajoz: Acedera, Aljucén, Atalaya, Barbaño, Baterno, Capilla, Casas de Reina, Cristina, Fuente del Arco, Gargáligas, Garlitos, Guadajira, Garbayuela, Helechal, Higuera de Llerena, Hinojosa del Valle, La Lapa, Magacela, Malcocinado, Mengabril, Orellana de la Sierra, Reina, Sancti Spiritus, Tamurejo, Torremayor, Trasierra, Valle de Matamoros, Valverde de Burguillos, Villarta de los Montes y Zarza Capilla. La localidad más grande es Torremayor (957 habitantes) y la más pequeña Risco (con 140).