El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha afirmado este lunes que una correcta planificación eléctrica en el conjunto del país permitirá el adecuado desarrollo energético de Extremadura y ha recordado que fue la primera en elaborar un plan regional integrado de energía y clima, conforme a lo establecido en el documento nacional.

En este sentido, ha firmado que “fuimos los únicos en enseñar nuestro esquema de trabajo hasta 2030” y ha asegurado que “hemos dedicado muchas horas de trabajo en la siguiente planificación eléctrica de nuestro país”.

Fernández Vara ha explicado que “se van a sentar las bases de lo que va a ser la política energética en España en los próximos años”, asegurando que “será en la planificación donde estén los contenidos de la capacidad de evacuación eléctrica, siendo la política energética un elemento trascendental para Extremadura”.

El jefe del Ejecutivo regional ha hecho estas declaraciones en Mérida, en la inauguración de la Jornada “La transición energética”, acto en el que ha estado acompañado por la consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García.

Ha asegurado en los últimos años se ha producido un proceso sociológico “enormemente interesante” que tiene mucho que ver con la pérdida de ingenuidad “de nuestro futuro y de nuestro planeta” y también una mayor sensibilidad respecto al comportamiento del hombre en relación con el entorno.

Sobre el contexto de reindustrialización que se tiene que producir en Europa y España tras la crisis provocada por la Covid-19, Fernández Vara ha afirmado que “Extremadura aparece como un campo abonado de oportunidades, sobre todo en la generación de energía eléctrica a través de fuentes renovables y con un impacto en la economía regional a través de tres procedimientos”.

El primero de ellos es el impacto directo que tiene en los recursos económicos de la zona donde se instalan los parques, en forma de contribuciones anuales y estables para toda la vida que permiten a los ayuntamientos hacer políticas públicas, muchas de ellas relacionadas con el empleo.

Un segundo elemento claro es el impacto en las plantillas que tienen las empresas y cómo esta evolución ha producido un incremento del empleo de las empresas auxiliares de lo que es un nuevo sector.

El tercer elemento es “probable que cuantitativamente sea el más importante de ellos y es que en esa reindustrialización las empresas, los inversores y el capital van buscando sitios donde la energía les cueste más barata y la que cuesta más barata es la energía renovable”, siendo por ello que muchas empresas se instalan en la región porque la lado pueden montar una planta donde la energía les salga más barata.

Fernández Vara ha insistido que “todo esto no son regalos caídos del cielo” sino fruto del trabajo que se ha realizado en los últimos años, así como la consecuencia lógica de una nueva sociedad que nace a partir del momento en el que las fuentes de energía más barata son las renovables, aunque ha subrayado que “queda todavía mucho por hacer en el ámbito del autoconsumo o de las comunidades energéticas locales”.

Ha relacionado este tema con el reto demográfico, ya que ha comentado que hay pocas políticas que tengan tanto impacto directo en el reto demográfico y la lucha contra la despoblación como la política energética, ya que están distribuidas en el territorio.

“El 75 por ciento de toda la inversión en políticas energéticas están en el medio rural porque está muy adecuadamente distribuido por todo el territorio”, ha concluido.