Alcazaba Festival cierra su cuarta edición consolidándose como uno de los eventos musicales más potentes de la región. Casi veinte mil personas han pasado este año por el recinto pacense para disfrutar de la música en vivo con artistas de gran nivel, como Robe que colgó el cartel de sold out, algo que en Alcazaba sólo había conseguido los dos espectáculos de Love’s 90.

Fondo Flamenco regaló a sus seguidores un momento único en Alcazaba Festival, como ellos denominan su gira: “La última cita”, un concierto mágico y es que sus tres componentes, Alejandro Astola, Antonio Ríos y Rafa Ruda, que marcaron un hito en su momento, se han reunido tras más de una década separados. Un show muy gamberro, lleno de interacciones con el público y en el que utilizaron continuamente las escaleras que presidían el impresionante escenario.

Público de todas las edades esperaba expectante poder ver a sus ídolos de juventud más de una década después y no defraudaron. Los asistentes disfrutaron coreando, de principio a fin, de los temas que los llevaron a lo más alto del panorama musical español en la primera década del siglo, tales como “Ojalá” o “Princesa”, lo que el públicó agradecío, dejándose en una noche festiva al compás del trio sevillano, en lo que fue un cierre redondo de Alcazaba Festival.

SATISFACCIÓN EN LA DIRECCIÓN

El ambiente del festival se ha trasladado estos días a las zonas de restauración y hostelería de la ciudad, con mucho de sus establecimientos hoteleros al 100% de ocupación, lo que posiciona a la ciudad como eje turístico también en los rigores del verano.

En este sentido, tras el éxito de esta edición, el deseo de la dirección es ampliar el número de días del certamen y para ello se sentarán en breve, para organizar futuras ediciones, con Ayuntamiento de Badajoz y Junta de Extremadura, instituciones a las que ha agradecido su apoyo e implicación.

También ha sido esta “la edición más accesible de Alcazaba Festival”, ha destacado el director del certamen, Carlos Lobo. Un total de veinte personas, la mayoría el primer día, han hecho uso del servicio del traslado de personas con movilidad reducida, a cargo de Cruz Roja.

Por otro lado, Alcazaba Festival también ha puesto a disposición de las personas con discapacidad auditiva el servicio de mochilas vibratorias y bucle magnéticos, un servicio que ningún usuario ha requerido, pero que “nos da mucha visibilidad” han comentado desde Audiosigno y que seguirá presente en próximas ediciones: “Nuestra intención es prestar este servicio tanto en nuestros festivales como en conciertos puntuales que celebremos en la región”, ha recalcado Lobo.