“Concentrador de mosto” es el título de un micro documental realizado por el grupo Viñaoliva para mostrar la importante labor social y los beneficios de esta infraestructura, única en la región, para el sector agrícola de Extremadura.
El documental expone el principal problema que sufren los agricultores extremeños, la falta de agua y la baja competitividad, lo que esto supone con respecto a otras comunidades y que tiene como solución la unión de cooperativas para producir volumen. De ahí que el concentrador de mosto sea una alternativa más para los socios de base y cuya finalidad no es otra que la de asegurar que los productos del agricultor tendrán una salida más en los mercados nacionales e internacionales al aumentar la diversidad de productos que pueden elaborar y ofertar.
El audiovisual está dirigido por el cineasta extremeño Alberto Calvo Báez y se estrenará el próximo 14 de Octubre en las redes sociales del grupo Viñaoliva.
Según Vito Céspedes, responsable del concentrador de mosto, “este año hemos vivido una vendimia muy atípica y que, por suerte para las cooperativas del grupo Viñaoliva, tienen una salida comercial. La fecha de vendimia ha llegado y la graduación no ha alcanzado a sus niveles adecuados de una maduración industrial, tampoco fenólica. Por lo tanto la cosecha ha sido menor en términos de graduación, no de kilos”.
Para que nos hagamos a la idea, un kilo de uva suele tener un rendimiento de entre un 75% y 82% dependiendo de la variedad pero este año ha sido inferior, entre un 5% y un 7% menor que un año normal. Para el socio esto podría suponer una menor rentabilidad.
Asimismo, añaden que “por suerte, el hecho de tener el concentrador del grupo Viñaoliva nos ha permitido destinar a mosto y mosto concentrado esas uvas con menor graduación. Lo que supone una salida más en otros mercados para el producto garantizando así la rentabilidad del socio de base”.
Sus productos van destinados a países como Alemania, Angola, Camerún, Austria, Bélgica, Rusia, Italia y, como mercado nacional, España. A veces existen oportunidades en pequeños mercados de nicho, a los cuales pocas empresas prestan atención precisamente porque son limitados en volumen, pero pueden suponer grandes beneficios como el asiatico o áfrica del sur entre otros, explican desde el grupo Viñaoliva.
Por último, indican que “gracias al concentrador de mosto, este año hemos podido solucionar la problemática del clima que hemos sufrido, entre sequías y olas de calor, ya que se ha podido destinar parte de esas uvas con poca graduación a complementar la oferta en volumen de los mostos concentrados que tiene el grupo Viñaoliva, asegurando así que el agricultor de base va a tener su producto vendido y por lo tanto una rentabilidad de su producción”.
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