El Grupo Social ONCE celebra el 13 de diciembre, día de Santa Lucía, patrona de las personas ciegas y fecha de nacimiento de la Organización, con el hito de haber superado por primera vez en su historia los 75.000 trabajadores y trabajadoras, de los cuales el 60% son personas con discapacidad y un 44% mujeres. De ellos, un total de 1.646 desarrollan su labor en Extremadura.

“Hoy es difícil encontrar a alguien que rechace la posibilidad de que una persona con discapacidad pueda integrarse perfectamente en el mercado laboral. Ha costado mucho, muchos años, muchas campañas de comunicación y concienciación, mucho trabajo de nuestros profesionales para convencer de que este modelo, único en el mundo, es posible y es una realidad”. Este es el mensaje que van a lanzar conjuntamente el delegado de la ONCE en Extremadura, D. Fernando Iglesias, y el presidente del Consejo Territorial, D. Venancio Ortiz, durante la celebración de Santa Lucía, a la que asistirán más de mil personas en Extremadura.

Bajo el lema “La Ilusión se trabaja”, los 75.000 trabajadores y trabajadoras del Grupo Social ONCE, además de las personas ciegas afiliadas a la Organización, más de 71.000, de ellas 2.035 en Extremadura, han querido mostrar su agradecimiento a la ciudadanía española por su confianza y complicidad para alcanzar este logro, que se apoya en el acceso al empleo como verdadera palanca de inclusión.

“Este logro es de toda la ciudadanía española que, apoyándonos durante más de ocho décadas, ha conseguido su autotransformación en una sociedad mejor, más de todas y para todas las personas, sean como sean, vengan de donde vengan, con y sin discapacidad”, han destacado.

Se trata de un nuevo hito en la historia de la Organización, nacido en 1938, y que consolida así la efectividad de su modelo social y empresarial inclusivo, único en el mundo, que genera valor para la ciudadanía con toda su actuación, convencidos además de que el acceso al mercado laboral es el mejor testimonio y acreditación de la capacidad de las personas de contribuir con esfuerzo, dedicación y compromiso a la mejora de la sociedad, además de para la propia motivación y autoestima.

No pensión, sí trabajo.

La ONCE nació el 13 de diciembre de 1938 cuando un grupo de personas ciegas, herederas de las primeras asociaciones de ciegos en España de finales del siglo XIX y principios del XX, se unieron para tomar una decisión que marcó la historia y el devenir de las personas ciegas y con discapacidad en España. Rechazaron una pensión y pidieron un trabajo. Ahí está la clave de entonces, y de ahora: el empleo como herramienta de normalización y de inclusión.

En este empeño, el Grupo Social ONCE (la suma de ONCE, Fundación ONCE e Ilunion) llevan trabajando hace casi nueve décadas para crear un modelo socioeconómico capaz de demostrar que la incorporación masiva y la aportación de estas personas a las empresas y a la sociedad en general es una opción absolutamente innegociable en los tiempos que corren.

El empleo como fin.

Porque para el Grupo Social ONCE, el empleo no es un medio para alcanzar algo, sino que el empleo, generar un puesto de trabajo, especialmente para una persona con discapacidad, se constituye como un fin, un objetivo a lograr, lo que le hace estar presente en muchas áreas económicas, especialmente en aquellas en que las que se requiere mano de obra intensiva, siempre bajo el prisma de la rentabilidad.

Así, de los más de 75.000 trabajadores y trabajadoras que actualmente componen la plantilla del Grupo, más de 22.000 lo hacen en la gestión y venta de productos de lotería social, segura y responsable; 11.000 personas trabajan en limpieza y medio ambiente; unos 10.500 operan en los sectores industrial y automoción; alrededor de 7.000 lo hacen en el sector textil, especialmente lavanderías industriales; otros 6.500 trabajadores y trabajadoras dependen del sector de servicios a empresas, 6.000 en seguridad, 4.500 más trabajan en contact center y 2.000 en turismo, básicamente hoteles; además, más de 3.000 se dedican a prestación de servicios sociales a personas con discapacidad; 1.300 en atención a personas mayores, mientras que unos 500 operan en retail; 400 en consultoría; 200 en economía circular y unas 300 personas en servicios globales.

Este hito supone una satisfacción para el Grupo Social ONCE, que afronta el futuro con seguridad y optimismo hacia una sociedad más y más inclusiva. Y con un compromiso firme: trabajar por la igualdad de oportunidades para personas con discapacidad, construyendo un modelo de negocio y de empresa que demuestra cada día que la rentabilidad económica y empresarial es perfectamente posible.