UPA-UCE Extremadura ha celebrado esta mañana una rueda de prensa en Mérida en la que ha reivindicado que el MAGRAMA y la industria cumplan con los compromisos adquiridos con los tabaqueros. Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE Extremadura, ha analizado la “dramática situación” que viven los cultivadores extremeños, ya que el sector está “a punto de desaparecer” si no se articulen las medidas necesarias que se acordaron en las últimas reuniones.
Esta situación se debe a la combinación de varios factores. Por un lado, la puesta en funcionamiento de la nueva PAC ha agravado los problemas del sector al suponer la reforma un recorte importante en las ayudas: “Ha desaparecido la ayuda acoplada, los tabaqueros van a perder más del 20% del valor del anterior pago único y la ayuda agroambiental se ha reducido en un 25%, pasando de 850 €/ha a 600€/ha”.
La gran incertidumbre generada en los productores por el cierre de ALTADIS (IMPERIAL TOBACCO) en Logroño dio lugar a una serie de reuniones en las que se acordó con la Ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina; el Presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara y la empresa pública CETARSA llevar a cabo actuaciones que dieran más estabilidad al sector: “A día de hoy poco se ha hecho”, señala Huertas.
En primer lugar, el Ministerio no ha acometido la trasposición de la Directiva Comunitaria, que serviría para que las manufactureras pudieran llegar a acuerdos plurianuales de compra. La UE obliga a los Estados Miembros a tener hecha la adaptación de la normativa europea antes del 20 de mayo y desde UPA-UCE dudan que el Gobierno español pueda cumplir este plazo.
Además, Huertas recuerda que queda pendiente la armonización de la fiscalidad, pese a que el Gobierno nacional se embolsa más de 10.000 millones de euros al año de los impuestos sobre el tabaco: “Pero luego solo obtenemos indiferencia por parte del Ministerio ante los problemas reales que tiene el sector”.
Para Huertas “el Gobierno en funciones no funciona” y además está perjudicando gravemente a los tabaqueros, poniendo en riesgo el trabajo de más de 20.000 familias que dependen de este cultivo.
CONTRATACIÓN DE LA CAMPAÑA 2016-2017
Huertas hace hincapié en que la contratación de este año “ha vuelto a ser muy complicada para los productores” porque a pesar de los compromisos de compra que había adquirido la empresa pública CETARSA (se había comprometido a aumentar la contratación de 2015) las previsiones apuntan a un descenso en torno al 3% sobre la producción del pasado año, que ya tuvo una reducción importante sobre la contratación tradicional (un 7% menos). En total, UPA-UCE cifra una bajada del 10% con respecto a 2014.
Con respecto los precios, Huertas denuncia la congelación de “unos precios ruinosos” que para esta campaña se sitúan en torno a los 2,25 €/kg de virginia. En este sentido, desde la organización profesional agraria señalan que los costes de producción se sitúan alrededor de los 2,50 €/kg. Por tanto, estos precios representan unas pérdidas reales para los tabaqueros de 6.500.000 € para este año. Además, estos precios hacen que Extremadura se sitúe a la cola del resto de productores de los países europeos: por ejemplo, los cultivadores italianos perciben 2,70 €/kg y los franceses 3 €/kg. Por ello, desde UPA reclaman un incremento de precios para esta campaña, que no debería ser inferior al 10%.
Por otro lado, desde UPA-UCE han denunciado que CETARSA va a comprar la mitad del burley que el año anterior: “Están perjudicando de manera directa a las pequeñas explotaciones familiares que han estado soportando unas campañas de precios ruinosos y ahora les dicen que no les contratan el burley porque este tabaco se lo llevaba la empresa que quiere cerrar la fábrica de La Rioja. ¡Y eso que no pasaba nada con el cierre la fábrica!”.
Por todos estos problemas, UPA-UCE califica como “desoladora” la situación actual del cultivo y alertan de que esta crisis puede suponer el punto y final para el sector productor en la región: “Estamos cansados de oír hablar a nuestros Gobiernos de la importancia del sector tabaquero y luego ver que lo dejan abandonado a su suerte para incumplir las promesas que hicieron a los cultivadores. Si realmente creen que el tabaco es un sector estratégico, este es el momento de actuar y tomar medidas para que no desaparezca”.
Huertas estima que de los 800 productores de tabaco negro de la región, esta campaña unos 300 abandonarán el cultivo: “Les han expulsado del sector”.
Desde UPA-UCE advierten que “no están dispuestos a dejar que el sector tabaquero desaparezca”, por lo que anuncian que si la situación no cambia están planteando convocar movilizaciones para el otoño.
Sin comentarios