La 62 edición del Festival de Teatro Clásico de Mérida se ha cerrado con un superávit de taquilla de 486.185 euros, mientras que la recaudación total se cifra en 2.005.000 euros.

Estos datos han sido ofrecidos en rueda de prensa por el director del Festival, Jesús Cimarro, tras una reunión con el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, en la que le ha dado a conocer las cuentas de la pasada edición del certamen.

En la misma comparecencia, Fernández Vara ha anunciado que la posible convocatoria de los premios Ceres en 2017 dependerá de que fructifiquen las “gestiones de patrocinio” que se están llevando a cabo y cuyo resultado se dará a conocer ya en febrero del próximo año.

El presidente de la Junta ha agradecido a Cimarro el trabajo realizado para alcanzar el éxito en la 62 edición, especialmente por el hecho de que el concurso por el que se adjudicó la organización del certamen a la empresa Pentación, de la que es titular, “se resolvió avanzado ya el año” y dispuso de “muy poco tiempo”, a pesar de lo cual “ha mantenido el listón muy alto”.

“Si es complicado llegar arriba más complicado es mantenerse”, ha dicho el presidente, quien ha añadido que el Festival “ha fidelizado a un público con perfiles muy variados y eso es lo que tenemos que seguir intentando en los próximos años”.

Por otra parte, a preguntas de los periodistas, Fernández Vara anunció que probablemente se hará una presentación del Festival el próximo año en Lisboa y descartó “de momento” que se vayan a incorporar nuevas subsedes para la 63 edición, que se presentará en marzo de 2017.

MODELO DE GESTIÓN CONSOLIDADO

En relación con las cuentas de la última edición, el director del Festival de Mérida ha destacado el hecho de por primera vez se haya superado “la barrera” de los dos millones de euros (en 2015 fueron 1.850.000 euros).

Cimarro considera que el Festival cuenta con un “modelo de gestión consolidado”, como demuestra el hecho de que, desde el año 2012, cuando la empresa Pentación se hizo cargo del certamen, el certamen haya aportado a las arcas de la Comunidad Autónoma la cifra de 2.119.367 euros.

Igualmente, ha contrastado las cifras correspondientes a los ingresos por taquilla entre el año 2011 (1.250.000 euros) y el año 2016 (2.005.000 euros).

Por lo que respecta a las cifras de público, en la 62 edición hubo 163.483 asistentes a las distintas actividades y representaciones teatrales ofrecidas por el Festival, un 3,27% más que en 2015.

Por lugares de procedencia, Badajoz y Madrid encabezan el ranking seguidos de Cáceres, Sevilla, Barcelona, Cádiz, Toledo, Salamanca, Málaga y Vizcaya. Y por países, por orden de afluencia, son Portugal, Francia, Reino Unido y Alemania, entre otros.

Por rangos de edad de los compradores, el 27% tiene edades comprendidas entre los 45 y los 54 años. Llama mucho la atención, según la Dirección del festival, que están seguidos muy de cerca de los espectadores entre los 35 y los 44 años, que llegan al 25% del total; y los que están entre los 25 y los 34 que superan el 20%. La media es de 44 años.

La venta en taquilla sigue siendo la de mayor volumen con un 53,41% aunque seguida ya muy de cerca de la venta por Internet, que este año ha sido del 42,96%.

Del total de las entradas vendidas, el 30% se adquirieron de forma anticipada; cerca de 1.900 personas compraron abonos para ver entre 5 y 8 espectáculos; y más de 3.800 espectadores se beneficiaron de los descuentos para jubilados, desempleados, jóvenes, estudiantes y discapacitados.