El cultivo del arroz, que ocupa unas 24.000 hectáreas de nuestros regadíos, está atravesando una situación muy grave por la baja rentabilidad de las explotaciones. “El problema que tenemos es que el precio del arroz ha descendido a niveles de hace 20 años, generando pérdidas muy graves a los productores. No se puede producir a perdidas permanentemente”, explica nuestro secretario general, Ignacio Huertas.
Para nuestra organización, esto no tiene sentido con un producto que es deficitario en Europa, es decir, que no producimos lo que consumimos (producimos 1.800.000 toneladas y consumimos sobre 3.000.000 T).
Para Huertas, el problema radica en el incremento desproporcionado de las importaciones de otros de los países, principalmente de Camboya y Birmania. “Estos países están introduciendo sus arroces sin ningún tipo de arancel a precios muy bajos y hunden los precios en el mercado europeo, generando pérdidas muy graves a los productores”, comenta Huertas.
La UE ha decidido actuar y, atendiendo a una demanda que presentó Italia en febrero, estudiará si los volúmenes y precios de las explotaciones de países como Camboya o Myanmar están causando una problemática grave a los productores europeos. Si esto se demuestra, se aplicará la cláusula de salvaguardia para el arroz, que podría limitar la entrada masiva de este cultivo o cerrar las importaciones durante el periodo de comercialización de nuestro arroz.
La investigación se centrará en las últimas cinco campañas, desde el 1 de septiembre de 2012 al 31 de agosto de 2017, y la Comisión pedirá información a industrias y productores para comprobar cuál ha sido repercusión. “Con ello se daría una mejor situación de mercado a nuestros productores durante el periodo de comercialización del arroz”, destaca el secretario general de UPA-UCE.
Por esto, y atendiendo a la importancia que este procedimiento tiene para nuestros productores, desde UPA-UCE hemos decidido personarnos en el mismo con el objetivo de que se determine el perjuicio que estas importaciones están generando a los arroceros de nuestra región.
UPA-UCE hace un llamamiento al conjunto del sector, tanto a productores como cooperativas, para que colaboren y nos faciliten los datos de dichas campañas (a nivel de precio, siembra, superficie) con el objetivo de poder demostrar el perjuicio que supone las entradas masivas de arroz.
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