A poco más de un año de que se cumpla el 50º aniversario de la canonización de San Juan Macías, Ribera del Fresno ha decidido dar un paso firme para convertir esta efeméride en algo más que un acto litúrgico. Lo que se proyecta es una cita que unirá la fe, la historia, la cultura y el turismo espiritual, con un programa que aspira a situar a este municipio pacense en el mapa nacional e internacional de las peregrinaciones.

La figura de San Juan Macías —humilde pastor y labrador ribereño que terminó su vida como fraile dominico en Lima, Perú— trasciende las fronteras locales. Canonizado por Pablo VI en 1975, es patrono de los emigrantes y protector de los pobres. Para la comunidad dominica y para la capital peruana, donde reposan sus restos, su culto forma parte de la identidad religiosa. Sin embargo, en su tierra natal aún hay un potencial por explotar para dar a conocer su vida y legado.

Un camino que vuelve a abrirse

La “Semana de San Juan Macías” se celebrará del 16 al 21 de septiembre y tendrá como acto central la misa de la tradicional Romería del Pocito el domingo 21. El momento más simbólico será el sábado 20, cuando la imagen y las reliquias del santo recorrerán denuevo el antiguo camino de peregrinación hasta el Pozo que lleva su nombre, en una procesión que busca revivir el ambiente de devoción de décadas pasadas.

El alcalde, Miguel Ángel Araya, convocó una reunión de trabajo en la que participaron la Hermandad de San Juan Macías, la Parroquia, La Providencia-Hogar de Nazaret y el consultor turístico Jaime Ruiz Peña, con experiencia en proyectos de puesta en valor patrimonial y en turismo religioso.

Jaime Ruiz Peña y su vínculo con Ribera

La colaboración de Jaime Ruiz Peña no es casual. Su relación con la localidad se ha tejido a lo largo de los años a través de actos y proyectos muy diversos. El 7 de octubre de 2007, en pleno Año del Centenario del Patronato de la Real Asociación de Caballeros de Santa María de Guadalupe, acompañó a esta institución en las LXXVIII Jornadas de Hispanidad, dedicadas a San Juan Macías y a Portugal, país históricamente vinculado a las peregrinaciones guadalupanas.

Tres años después, el 5 de agosto de 2010, organizó en Ribera del Fresno la primera cena fiesta italo-extremeño-ibicenca para la Hospedería Trattoria Posada Nostra, un encuentro singular que fusionó cultura, gastronomía y convivencia. En 2014, el 4 de mayo, participó en la Jornada de Recreación Hispano-Romana “Maia Beltane”, actividad que combinaba divulgación histórica y actividades lúdicas, y en el que colaboró durante varias ediciones en la puesta en valor del Oppidum de Hornachuelos.

Su papel en la conmemoración del aniversario de la canonización busca ahora dar un paso más: conectar la memoria histórica con una estrategia de promoción turística.

Milagro, historia y hermanamiento

Entre los actos previstos destaca el hermanamiento con Olivenza, motivado por el llamado “Milagro del Arroz” de 1949. La historia cuenta que Leandra Rebollo, cocinera oliventina nacida en Ribera del Fresno, se encomendó al entonces beato San Juan Macías para poder alimentar a decenas de familias con apenas 750 gramos de arroz. El alimento se multiplicó de forma inexplicable, convirtiéndose en un relato de fe transmitido de generación en generación.

Este hermanamiento, aprobado por unanimidad en el pleno municipal, no solo refuerza los lazos históricos y culturales, sino que puede convertirse en un elemento distintivo para atraer peregrinos y visitantes.

Ribera y el turismo espiritual

Extremadura, pese a no figurar en el imaginario masivo de las grandes rutas de peregrinación como Santiago de Compostela, cuenta con un enorme patrimonio religioso y espiritual. Desde 2018, la Dirección General de Turismo dispone de una aplicación oficial que recopila más de un centenar de recursos espirituales, donde Ribera del Fresno y San Juan Macías aparecen como puntos de interés.

La “Semana de San Juan Macías” aspira a integrarse en esta red, aprovechando la cercanía de otros itinerarios como el Camino Mozárabe o la Ruta de Guadalupe, y vinculándose a la creciente tendencia del turismo slow y de experiencias transformadoras.

Un año para abrir las puertas

Los organizadores insisten en que el aniversario debe servir para “abrir las puertas de Ribera al mundo” y mostrar su patrimonio material e inmaterial. Además de los actos religiosos, se prevén conferencias, exposiciones, rutas guiadas y actividades para escolares. El objetivo es implicar a toda la población, desde las hermandades y asociaciones culturales hasta los centros educativos y el tejido empresarial.

El 50º aniversario de la canonización de San Juan Macías será, por tanto, mucho más que una fecha en el calendario: será la oportunidad de recordar a un hombre que hizo de la caridad y la humildad su camino de vida, y de proyectar la identidad de Ribera del Fresno hacia un futuro donde la fe y el turismo puedan caminar juntos.

Juan Francisco Llano