La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos en Extremadura se ha reunido hoy con responsables del Ministerio para analizar la difícil situación que pasa el sector arrocero, que encadena años de precios por debajo de costes. Para UPA-UCE es necesario que el Ministerio presione a la Unión Europea para que se investiguen las importaciones de arroz de Camboya y Birmania (Myanmar), países con un tratado “Todo menos armas” (EBA) y mediante los cuales otros estados limítrofes introducen su arroz en Europa.

Desde hace unos años Camboya y Birmania han multiplicado sus exportaciones de arroz a la Unión Europea de forma que, actualmente, el cultivo corre peligro de desaparecer debido a los bajos precios que perciben los arroceros de la UE: “En la pasada campaña los precios se situaron en niveles del año 2000, así no podemos seguir”, señala Ignacio Huertas, secretario general de UPA-UCE Extremadura, que ha trasladado la inquietud de los productores extremeños en la reunión mantenida esta mañana en el Ministerio.

En este sentido, Huertas hace hincapié en que “es necesario investigar las importaciones de arroz que hacen Camboya y Birmania a la Unión Europea”, pues apunta a que hay indicios suficientes de que estos países están cometiendo un fraude que acaban pagando los agricultores.

Las importaciones de arroz a la UE de los países acogidos al acuerdo “Todo menos armas” (principalmente Camboya y Birmania) se han incrementado, de 10.000 toneladas durante la campaña de comercialización 2008-2009 a 402.000 toneladas en 2013-2014. Por ello, desde la organización profesional agraria exigen a los responsables del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente que insten a la UE a investigar la procedencia del arroz, ya que sospechan que gran parte de este producto procede de países limítrofes que no se encuentran bajo el paraguas del acuerdo EBA, y que permite este tipo de importaciones sin aranceles: “Mientras nuestros productores están al borde de la ruina, Bruselas hace la vista gorda con un fraude de esta magnitud”, apunta Huertas.

Una de las posibles soluciones para frenar la reducción de las cotizaciones del arroz europeo sería aplicar la Cláusula de Salvaguardia durante el periodo de comercialización del producto, como ya propuso el pasado año Italia. A esta petición se sumó el sector productor europeo, que a finales de 2014 el envió sendas cartas a los Comisarios de Agricultura y Comercio para alertar de este grave problema. Sin embargo, la Comisaria Cecilia Malmström ha mantenido la negativa de la Comisión Europea a poner en marcha este mecanismo y únicamente ha trasladado al sector que la UE vigilará las importaciones de terceros países. Por ello desde UPA-UCE se ha vuelto ha insistir ante el Ministerio en la necesidad de articular medidas para acabar con la indefensión de los productores europeos de arroz, como contingentar las cantidades que estos países puedan exportar, estableciendo un número máximo de toneladas al año para evitar el deterioro del mercado interno.

Cabe recordar que en Extremadura hay 26.000 hectáreas dedicadas a este cultivo que producen una media de 162.000 toneladas al año, siendo un cultivo estratégico para el regadío de la región.