Trabajadores de la mina Aguablanca en Monesterio mantienen un encierro desde la tarde de este pasado jueves en la sede de la Mancomunidad de Tentudía en esta localidad pacense como señal de protesta por el anuncio de cierre de esta explotación, que afectaría a unas 400 personas.

En declaraciones a Europa Press Televisión, el presidente del Comité de Empresa de la mina, Eloy Sánchez, ha explicado que el encierro es “decisión unánime” del comité y cuenta con el apoyo de los trabajadores debido “al inmovilismo” de la empresa Río Narcea en la negociación.

Sánchez ha resaltado que solicitan “que la empresa recapacite”, que tome “otra decisión” y que “revoque” el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) planteado y cumpla con el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) “mínimo hasta abril”, el cual ya está “pactado y firmado”, ha asegurado.

“Podemos hablar de otras posible alternativas que seguro que las hay, que la empresa ni siquiera las ha contemplado ni las ha barajado y entre todos podemos llegar a otro acuerdo que no sea el cierre”, ha enfatizado.

Además, el presidente del Comité de Empresa ha dicho que, a su juicio, la empresa les “miente”, ya que no ha planteado “ninguna otra alternativa” y cree que “hay otro motivo” para plantear el cierre pero que la compañía “no nos enseña sus cartas”.

Sánchez ha añadido que “si se llegara al cierre” se verían afectados unos 400 empleos directos, además de la “repercusión social” porque supondría “un impacto socio-económico bastante grande en la comarca”.

Ha recordado, igualmente, que el posible cierre de esta explotación “afecta” también a Andalucía porque está ubicada muy cerca de tres poblaciones de esta región, algunos de cuyos vecinos también son trabajadores de la misma.

NO ENTIENDEN LA POSICIÓN DE LA EMPRESA

El presidente del Comité de Empresa ha subrayado además, que no entienden la posición de la empresa, ya que “todavía” quedan “casi cuatro millones de toneladas de níquel por extraer” toda vez que, según ha afirmado, la compañía “no ha tenido pérdidas hasta finales de 2015”.

“El único fundamento que da (la empresa) es el desplome del precio de los metales”, ha lamentado al tiempo que ha destacado que dicha caída de precios afecta también a las “demás minas” que están cerca de Aguablanca, pero “ninguna ha dicho que va a cerrar, nos parece un poco extraño”, ha apuntillado.

Por otra parte, Sánchez ha puesto en valor que desde que se conoció la noticia del posible cierre han llevado a cabo “muchísimas” acciones, como reuniones con el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y el consejero de Economía e Infraestructuras, José Luis Navarro, encuentros con diferentes instituciones tanto extremeñas como andaluzas.

En ese sentido, ha resaltado que los alcaldes de los municipios que se ven perjudicados “intentaron reunirse” con el ministro de Industria en funciones, José Manuel Soria, pero lamentado que éste “no está haciendo nada por esta comarca, parece que está mirando hacia otro sitio como si no le importáramos”.

Así, ha sostenido que el Ministerio “tiene mucho que ver aquí” ya que “esta reserva es del Gobierno español” y “hasta ahora no ha mostrado ningún interés”. “Estamos recibiendo muchísimo apoyo por parte de las demás instituciones, pero por lo que es el Ministerio no estamos teniendo soluciones ningunas”, ha apuntado.

Por ello, ha subrayado que para los próximos días están preparando concentraciones, el viernes, 26 de febrero, en Badajoz frente a la sede de la Delegación del Gobierno y el 2 de marzo en Madrid en la puerta del Ministerio de Industria. Sánchez ha asegurado que no van a parar: “vamos a morir matando”, ha advertido.