El Diario Oficial de Extremadura (DOE) publica en su edición de este viernes, 19 de agosto, la resolución por la que se procede a abrir el expediente para declarar Bien de Interés Cultural (BIC), de carácter inmaterial, a la Danza y Fiesta de la Virgen de la Salud de la localidad pacense de Fregenal de la Sierra, con el objetivo de reconocer y proteger este elemento relevante del patrimonio cultural extremeño.

Tras la publicación en el DOE de esta resolución, se abre ahora un periodo de un mes para el trámite de información pública. La Danza y Fiesta de la Virgen de la Salud será el segundo BIC extremeño de carácter inmaterial, tras el reconocimiento de ‘A Fala’ en 2001, que se suman a otros más de 250 bienes inmuebles y muebles protegidos.

Pueden ser objeto de este reconocimiento, tal y como recoge la Ley 2/1999, de 29 de marzo, de Patrimonio Histórico y Cultural de Extremadura, los siguientes elementos inmateriales: “las artes y tradiciones populares, los usos y costumbres de transmisión consuetudinaria en canciones, música, tradición oral, las peculiaridades lingüísticas y las manifestaciones de espontaneidad social extremeña”.

La Danza y Fiesta de la Virgen de la Salud merecen ser reconocidas, según los técnicos de la Secretaría General de Cultura de la Junta de Extremadura, porque “constituyen un rico patrimonio no tanto por la originalidad / singularidad de este ritual festivo cuanto por estar indisolublemente unido a Fregenal de la Sierra, a su historia y a su cultura y cuya continuidad se explica con los esfuerzos sostenidos individual y colectivamente por unos actores sociales que, en última instancia, son y han sido protagonistas y responsables de que haya llegado a nuestros días”.

RITUAL RELIGIOSO

Es una manifestación en la que la danza se integra en el ritual religioso y se constituye en un todo absolutamente referencial e identitario para la comunidad local. Se enriquece, además, con la hermandad, los preparativos, el tamborilero, la Iglesia de Santa Catalina, la imagen de la Virgen, la subasta, la procesión, el rosario o la solidaridad entre los hermanos.

Este ritual frexnense tiene lugar entre el 30 de agosto y el 8 de septiembre. La Hermandad de la Virgen de la Salud se encarga de la organización y los preparativos y vela a su vez por el mantenimiento de una tradición cuyos orígenes se remontan a 1757, donde se localizan documentos escritos que nos hablan ya de la fiesta.

Imagen de la danza

El punto de partida lo marca un tamborilero que, en la mañana del 30 de agosto, acompañado de la chiquillería, realiza un pasacalle que se repite por la tarde, tocando en la casa de cada uno de los hermanos.

El día 6 de septiembre se celebra el rosario y hasta el día 7 se desarrolla el novenario. Este mismo día 7 la hermandad coloca la mesa de subasta en las puertas de la Iglesia de Santa Catalina y el vecindario deposita los regalos a la Virgen, que serán subastados a gritos entre los asistentes.

8 DE SEPTIEMBRE

El 8 de septiembre, en torno a las seis de la madrugada, la comitiva oficial encabezada por el mayordomo y la directiva de la hermandad, salen del templo en compañía del tamborilero para realizar la Alborada, una de las partes más emotivas de la fiesta, pues consiste en ir a recoger a sus casas a los ‘lanzaores’ (degradación lingüística del término ‘danzadores’), a cuya comitiva se van sumando silenciosamente algunos hermanos hasta llegar al templo para asistir a la Misa del Alba.

Tras la misa, los ‘lanzaores’ ejecutan la danza frente a la Virgen de la Salud, momento especialmente importante en esta celebración, y posteriormente se inicia un maratoniano peregrinar por todo el pueblo, que terminará en torno a las cuatro de la tarde, en el que la danza se repite en muchas más ocasiones, delante de las casas de hermanos y en algunos otros lugares.

Posteriormente, a las siete de la tarde, se inicia la multitudinaria procesión que acompaña a la Virgen por las calles de estación.