El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha asegurado que Extremadura debe estar preparada para ofrecer las mejores condiciones profesionales que permitan que los jóvenes médicos decidan quedarse en nuestra comunidad. El mandatario extremeño ha participado hoy en el acto de graduación de la XLV promoción del Grado en Medicina de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad de Extremadura. Una celebración en la que también ha estado presente el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles.

Durante su intervención, el presidente autonómico ha restado importancia al drama de que los nuevos profesionales decidan continuar con sus procesos de formación fuera de Extremadura. En ese sentido, Fernández Vara ha puesto en valor la calidad formativa que han recibido desde la Universidad de Extremadura, pero “debemos ser conscientes de que irse fuera no es un castigo, es una oportunidad para ellos”. Por ello, ha insistido en que “desde aquí, lo que tenemos que hacer, es ofrecerles lo mejor. Los mejores medios, la mejor tecnología en los hospitales, los mejores recursos humanos, las mejores plazas en el futuro. No es una tragedia que la gente quiera formarse allí donde entienda que quiere formarse. Lo que deben saber es aquí van a tener siempre las puertas abiertas en un futuro próximo en el que vamos a necesitar a muchos médicos”.

Además, ha reiterado la enorme importancia de la capacidad de reflexión y pensamiento crítico que aportan los nuevos profesionales, al tiempo que les ha recordado que la medicina es una profesión muy exigente en la que no solo sirve con contar con conocimientos médicos, sino que es clave el lado humano en su relación con el paciente. El presidente de la Junta ha asegurado que la nueva generación de médicos es una apuesta segura y en la que es muy importante el vínculo personal de cada uno de ellos en el ejercicio de la profesión. “Os han enseñado a tratar las enfermedades del cuerpo, también las de la mente, pero nadie os ha podido enseñar las enfermedades del alma”, ha afirmado.

Por ello, les ha recordado que muchas de las penas y sufrimientos de los que serán sus pacientes van a estar, en gran medida, vinculadas a las patologías que les van a afectar y que se han visto aumentadas a partir de la pandemia. Por último, ha advertido a los nuevos médicos que las realidades a las que se van a enfrentar durante los próximos años “son imposibles de aprender en una formación universitaria. Solo se aprenden con la experiencia de la vida misma”.

Experiencias vitales que el presidente extremeño pidió a los nuevos graduados para que, en un día tan especial como el de su graduación, tuvieran siempre presente el recuerdo de sus abuelos “porque para ellos, un acto como el de hoy, les ayuda a dar sentido a sus vidas”.