Si eres madre seguramente ayer llegaran a tus manos manualidades hechas en el cole, ramos de flores, bombones o, si eres muy afortunada, algún viajecito con experiencia gastronómica incluida. Pero ayer, primer domingo de mayo, algunas madres, pasaron el día en un hospital acompañando a sus hijos e hijas sin poder salir a celebrar que madre, no hay más que una. Para hacer esa vivencia más amable, la Asociación para la Donación de Médula Ósea de Extremadura (ADMO), entregó a las madres que pasaron el día en la planta de oncohematología del Hospital Materno Infantil de Badajoz un desayuno muy especial con la colaboración de Pan Contigo.

Además, ADMO organizó un Respiro Familiar en el CEA El Salugral de Hervás en el que, mientras niños y niñas disfrutaban con juegos y deporte, las madres y padres de pacientes oncohematológicos de toda Extremadura, pudieron gozar de un fin de semana lleno de experiencias dirigidas a su bienestar como una tarde en el Spa o una ruta entre castaños. Con la filosofía de cuidar a las cuidadoras, ADMO, organiza actividades durante todo el año con el objetivo de acompañar a estas madres que sostienen el mundo en unas circunstancias muy especiales.

Al encuentro asistió la Diputada de Políticas Sociales, Igualdad, Participación y Atención a la Ciudadanía, Amelia Molero Fragoso.

Molero puso en valor el trabajo que ADMO realiza en favor de los pacientes oncohematológicos y sus familias y reiteró el compromiso que la Diputación de Cáceres tiene, desde hace años, con ADMO y la donación de médula ósea. Los respiros familiares de ADMO, se encuentran dentro del Servicio de Apoyo Psicosocial de la entidad y tratan de proporcionar un tiempo de ocio terapéutico a las familias que han pasado largas temporadas en el hospital.

Esta actividad que nació con la intención de ofrecer un espacio de descanso para las madres y padres y un entorno seguro de ocio para los niños y niñas, se ha convertido en la cita más esperada para pacientes y familiares.