Rafael Bermudo Balart, nieto del artista José Bermudo Mateos, fue el prestador de cinco obras, además de otros objetos, en la exposición que el Museo Provincial de Bellas Artes, MUBA, le ha dedicado recientemente. Residente en Barcelona, Balart ha decidido   donar a la Diputación pacense el total de los cuadros y artículos prestados. Según explica la responsable de la pinacoteca, María Teresa Rodríguez, lo ha hecho “para su mejor conservación y en muestra de agradecimiento por el interés y atención dedicada a la trayectoria de su abuelo”.

Las obras donadas son “Ciervos” de 1913, “Desnudo femenino” s.f., “Limpiando el estudio” fechada en 1903, “Estudio para la obra Buenos Amigos” de 1920 y “Un cigarro que no arde” de 1892.

Además de las obras reseñadas, el propietario hace donación de los siguientes objetos, publicaciones e imágenes pertenecientes a  Bermudo Mateos: catálogo de la Exposición General de Bellas Artes de 1891, Medalla de Tercera Categoría de la Exposición de Bellas Artes de 1892, Medalla de Tercera Categoría de la Exposición de 1895, Medalla del IV Centenario del Descubrimiento de América, Litografía de la “Alegoría de la Independencia de Argentina”, obra de Bermudo en paradero desconocido, y la Historia de José Bermudo Mateos, manuscrita y mecanografiada por su hijo y padre del donante, que pasará a formar parte de los fondos de la biblioteca del MUBA.

Desde el museo provincial desean destacar y agradecer la entrega desinteresada que algunos propietarios de arte hacen de obras de su colección con el fin de que sean disfrutadas por toda la sociedad. “Ellos son un ejemplo de generosidad y de concienciación de la conservación del patrimonio extremeño ya que, nada mejor que este museo para salvaguardar la memoria artística de nuestra región”, considera Teresa Rodríguez.