El director de la Editora Regional de Extremadura y coordinador del Plan de Fomento de la Lectura, Eduardo Moga, y la gerente territorial del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (SEPAD) de Cáceres, Cristina Lancho, han asistido en el Centro de Mayores Cervantes de Cáceres al cuentacuentos audiovisual en el marco de un proyecto desarrollado por el Plan de Fomento de la Lectura en Extremadura.

Con esta sesión se ha clausurado este ciclo de cuentacuentos que se ha desarrollado a lo largo del mes de febrero en centros de mayores y centros residenciales de Jaraíz de la Vera; Cabeza del Buey; Los Santos de Maimona; Hornachos; Miajadas; Alcántara; Navalmoral de la Mata; Granja de Torrehermosa; Plasencia y Cáceres. En total, cerca de 700 personas mayores han asistido a estas sesiones programadas por todo el territorio regional.

Eduardo Moga ha señalado que con esta iniciativa se ha querido “dinamizar y fomentar la cultura y la sensibilidad hacia la literatura” en este caso en un colectivo con más necesidades para el acceso a la lectura por razones físicas, psicológicas o por el mero desgaste de la edad. De ahí el compromiso de la administración regional por las “personas especialmente necesitadas de ayuda para acceder a uno de los valores fundamentales en nuestra sociedad y en nuestra vida como es el acceso a la cultura”, ha subrayado.

A esta última sesión han asistido también unos 50 alumnos de 4º, 5º y 6º de Primaria del cercano Colegio Cervantes. En esta línea, la gerente territorial del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (SEPAD) de Cáceres ha incidido en la importancia de este carácter intergeneracional de este cuentacuentos. Además, ha señalado que esta actividad, como otras muchas que se celebran, se asienta en el objetivo del SEPAD del envejecimiento activo de los mayores.

Estos cuentacuentos se incardinan en la iniciativa puesta en marcha por el Plan de Fomento de la Lectura en Extremadura para acercar la compañía, la alegría de la lectura y la música a colectivos sociales que pueden ser más vulnerables como son los jóvenes acogidos en centros de acogida y los mayores de los centros de mayores y centros residenciales dependientes del Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia (SEPAD).

Los cuentacuentos audiovisuales llevan más allá los cuentacuentos tradicionales, no se limitan a un relato oral lineal, sino que se configuran como representaciones teatrales, con música, de cuentos infantiles u obras de la literatura universal; con un resultado dinámico e integrador. Y tanto la música como la dimensión audiovisual del espectáculo refuerzan el interés del público, y ayudan a vehicular los valores que pretende transmitir, de orden ético -justicia, igualdad, solidaridad- y estético.

Los cuentacuentos audiovisuales los pone en escena Carlos Echepare, de Musicando Teatro, un músico con amplia experiencia en la materia. Echepare ha creado tres obras diferentes pensando en el público al que va dirigido: una versión de Platero y yo, de Juan Ramón Jiménez, para los mayores; el montaje audiovisual ‘Palabras al corazón’, para los jóvenes; y para los más pequeños Ane y el lobo, de Ana Olivera y Maite Gaztelumendi, un relato infantil publicado en la colección “Tigres de Papel” de la Editora Regional de Extremadura.