Con motivo del Día Mundial de la Salud, la ONG Farmamundi reivindica su papel en la mejora de la calidad de vida de las personas en riesgo de vulnerabilidad y la importancia de las organizaciones sanitarias en la defensa de la salud. La ONG, que celebra este año su 30 aniversario, ya ha prestado asistencia sanitaria a 27 millones de personas en más de 70 países en este tiempo, destacando el suministro de medicamentos esenciales, la promoción de la salud y la prevención de enfermedades en países en desarrollo.

Según datos de la Organización Mundial de la Salud, al menos unos 3.600 millones de personas en el mundo, es decir, la mitad de la población mundial, sigue sin disfrutar de una cobertura plena de servicios de salud esenciales. Además, casi 2.000 millones afrontan “un gasto en atención de salud catastrófico o empobrecedor”.

La salud es un derecho humano fundamental que debe ser accesible para todas las personas, especialmente para aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad. Por ello, desde los orígenes de Farmamundi en 1993 hasta la actualidad, la ONG ha abordado los problemas de salud desde una visión integral. “Estos años, nuestra razón de ser han sido los 27 millones de personas de más de 70 países que han recibido atención sanitaria a través de los 600 proyectos de cooperación y más de 300 intervenciones de acción humanitaria y emergencias que hemos llevado a cabo en estas tres décadas. Y es que las ONG sanitarias como Farmamundi somos necesarias para seguir poniendo el foco en la realidad de muchos países empobrecidos que de otro modo serían ignorados”, explica el director de la ONG, Joan Peris.

Suministro de 2.700 toneladas de medicamentos

Si bien el acceso a la salud va más allá del acceso a los medicamentos, estos son una parte indispensable para garantizar una calidad de vida digna y prevenir o tratar enfermedades. Así lo detalla Peris: “Los medicamentos, vacunas y productos sanitarios clasificados como esenciales deben ser considerados de primera necesidad, anteponiendo su disponibilidad y accesibilidad por encima de cualquier otro tipo de consideraciones políticas, económicas o religiosas”.

Es por ello que en estos 30 años, Farmamundi ha distribuido 2.700 toneladas de fármacos. “Pero todavía queda mucho por hacer -añade- Debemos seguir concienciando sobre la importancia de la salud y sobre las desigualdades que existen en el acceso a los cuidados sanitarios en diferentes partes del mundo”. Con las elecciones generales a la vuelta de la esquina y también las autonómicas en 12 comunidades autónomas, Farmamundi apela a que las y los gobernantes velen por el cumplimiento de los derechos humanos, y específicamente por el derecho a la salud. “Deben trabajar activamente para garantizarlos, protegerlos e impedir cualquier abuso”, afirma su director.

La responsabilidad de la clase política

“Desde la ONG, apostamos por el diálogo, la mediación y la colaboración entre diferentes actores para contribuir a la mejora del acceso a la salud a nivel global, mediante la generación de conocimiento, la reflexión y el pensamiento crítico orientado a la acción. Defendemos que las instituciones multilaterales, los gobiernos, la industria y la sociedad civil trabajen conjuntamente para hacer realidad un acceso universal, regular y seguro a los servicios de salud, desde una perspectiva integral”, concluye Peris.

Para concienciar sobre la importancia de la salud y sobre las desigualdades que existen en el acceso a los cuidados sanitarios en diferentes partes del mundo, Farmamundi ha desarrollado actividades de educación, consiguiendo movilizar en estos 30 años a 683.100 personas. Además, cuenta con 6.400 entidades colaboradoras que apoyan las iniciativas en favor de modelos sanitarios públicos y de calidad.