Nunca sabemos o sabremos si el hombre creó-inventó el arco y las flechas y, ya diseñada, éstas cambiaron el cerebro y, por tanto, la sociedad humana.

Antonio Burgos construyó y publicó un artículo titulado: Mañana, Día Nacional del Patinete, publicado en El Mundo, el 05 de enero del 2001. En este viajar por distintos articulistas, hoy le ha tocado la bola del patinete-comentario-artículo al autor que indicamos.

Siempre me ha llamado la atención, que las ciencias fuertes, como algunos las denominan, la física y la matemática, tiene un número limitado de variables o de funciones, y con ellas, explican, una inmensidad del mundo real. Nosotros los que nos dedicamos a las humanidades, disponemos de miles de palabras, para intentar encerrar entre un círculo de significantes-significados, algo de la realidad. Por tanto, podemos expresar de mil modos y maneras, un trozo-aspecto-variable de la realidad-ente.

El escritor y columnista Burgos, no se refiere al patinete eléctrico actual, sino al mecánico de hace unos lustros. El eléctrico siento-presiento que va a transformar-cambiar en cierto modo el transporte. Cierto es, que por fin van a aprobar o ya lo han hecho la necesidad del casco. Si se me permite, también, un chaleco reflectante, que se vea a cien metros, al menos. También se deben añadir luces, y un pequeño asiento. Si se reúnen todos estos cambios, ya tenemos, un modo de moverse por la ciudad-pueblo-barrio-aldea, y, por tanto, se supone se rebajará-reducirá-disminuirá la expulsión de C02, por tanto de contaminación, de reducción del cambio climático…

Aunque, ciertamente, aumentarán los accidentes semimortales y mortales. –Podríamos para esto último crear una campaña nacional, para que millones de personas, se planteen, como reducir los accidentes en estos vehículos, en eso la prensa podría tener un papel estelar, cosa que agradaría a los viandantes y a sus clientes, también, podrían reducir la velocidad máxima de esos instrumentos de movimiento…-

He pensado siempre que todo ser humano que habla-dialoga debe intentar expresar la verdad-bondad-belleza-racionalidad-prudencia de sus palabras, sea en el lenguaje oral natural, en la calle con un conocido, aún más, en los escritos. No todo el mundo, dicen, con razón, puede ser psiquiatra, ni cura, ni psicólogo, ni filósofo, ni pensador. Yo, añadiría, no todo el mundo puede ser escritor, ni escritor literario, ni escritor de columnas.

No porque no sepa el oficio de la redacción y sintaxis y estética, sino que todo escribiente tiene que someterse constantemente a una autocrítica, a una crítica personal de sus ideas, pero aún más de sus conceptos, de sus prejuicios y de sus fundamentos desde donde perciben la realidad. Realizar este trabajo es enorme. Pocas personas, son capaces, soportan durante décadas, no solo situar en crisis ideas y noticias y argumentos, sino desde dónde se creen-piensan-sienten-aceptan-verifican o sus principios-pilares-axiomas-fundamentos últimos, además de todas sus consecuencias-finalidades-intereses…

Diríamos, que como la mar, que lleva las olas a la costa, con piedras o arena, con bañistas con ropa o sin ropa, diríamos, que la vida me ha llevado, ya al final, a practicar-nadar, quedarme con dos géneros que son solo uno, el ensayo a fragmentos y el artículo como percepción de lo real, diríamos que aquí terminará, presiento-siento-percibo-creo mi vida intelectual creativa y de búsqueda de la verdad, de investigación, diríamos, si me atreviese, a ser un poco más vanidoso.

Encerrar en ochocientos-mil términos-palabras-vocablos entrelazados en forma de enunciados-conceptos-ideas-frases-oraciones de multitud de modos, como esculturas que siempre son fijas-inamovibles en la plaza del pueblo, pero que si te mueves, alrededor, en círculo ante y detrás de ella, parece que te mira, esos ojos, que de ser un bronce-hierro tan negro, no sabes, si te están diciendo algo, o te van a reprochar porqué las miras fijamente.

Un artículo-columna-comentario-crónica es eso, en señalar estados de conciencia, da lo mismo, se hable de una piedra, de un presidente de gobierno, de Nerón o de Napoleón, de una idea abstracta, o de tu pie que te duele esa mañana. En esta crónica-columna estoy hablando a su corazón-alma-mente-psique-cerebro-percepción-pasiones-deseos-pulsiones. Si las de usted. Pero posiblemente, usted no es consciente totalmente de ello.

En este mundo del fútbol de los columnistas, existen también muchas ideologías, muchos bandos, muchas estéticas, y, muchas peleas, como las que hemos heredado del siglo de oro, tantos intelectuales geniales de ese momento, matándose con espadas de palabras. Ahora, lamentablemente, también sucede lo mismo.

Pero mis ojos y mis manos y mi lengua, no están en esa dialéctica-óptica-visualización, intento comprender-entender, desde distintos puntos de vista. Una crónica-artículo, es eso, es enseñarnos algo, desde un punto de vista, cosa que hay que agradecer. Porque nadie te expresa, nada que sepa que a usted le incomoda. Al final, nadie le dice al pequeño rey que vende pipas en la plaza de la villa, que está equivocado en algo. Nadie, por tanto, cada día acumula más errores en casi todo. Solo los columnistas, como escriben para muchos, puede que le expresen algo, que usted no está de acuerdo, pero eso es la validez de una columna, porque puede llevarte a pensar de otro modo. Quizás, a hacerse preguntas viejas o nuevas, datos antiguos o nuevos, conceptos antiguos o nuevos…

Por tanto, lea usted columnas, de distintos autores, de distintas ideologías, de distintas banderas, así, así puede ser que se entienda usted mejor a usted mismo. Porque de lo contrario, le sucederá como a todos los autócratas-dictadores-tiranos-sátrapas, en su caso, vendedor de pipas y caramelos en la plaza de su pueblo. Que nadie se atreve a decirle nada, de llevarle la contra, y esa es la raíz, de porqué todas las dictaduras terminan destruyéndose desde dentro. No sea usted un pequeño dictador que vende patatas o que diagnostica enfermedades o que es madre de familia o es profesor o es viajante o… Lea artículos de todos los columnistas que van apareciendo en estos lares-lugares, de todos los colores pueden curarle esa autopatología, es síndrome de llevar usted siempre la razón-verdad-bondad. Paz y bien y prudencia…

http://personal.cim.es/filosofia © jmm caminero (05 diciembre 2021-12 enero 2022 cr).

Fin artículo 2.856º: “El patinete”.

Foto portada: Rincón de la Psicología